ZONA DE CAMBIOS...

Estoy en Lima y hablo con un amigo que está en Santiago y me cuenta de cómo sigue la relación amorosa en que se encuentra… me cuenta de la cautela y de que le carga que la gente no mida las consecuencias de sus actos, que por eso está en un proceso de transición, que se encuentra en “Zona de Cambios”.

Eso me hace pensar que a mi me pasó hasta hace poco lo mismo, que me encontraba envuelto en una espiral de sensaciones que no podía aclarar.

Lo bueno es que ahora tengo clara la película, de cómo debería ser la realidad de las cosas y cual es la realidad de lo que siento y quiero.

Mi amigo va por las relaciones de real compromiso y me comenta que le cargan los weas que mantienen esas relaciones medias ambiguas y que te hacen estar ahí, en status quo, te hacen sentir comprometido, pero ellos no se comprometen y que entonces uno le debe fidelidad a qué?

Ánimo viejo, pasa tu zona de cambios y acostúmbrate a ellos, no está mal lo que sientes y como manejas las relaciones, pienso y siento similar a ti. Un abrazo y nos seguimos viendo en el camino

Cuánto valemos?

Qué difícil es establecer cuanto valen las cosas intangibles, cuánto vale lo que sentimos? Me costó mucho cuando llegué a Chile entender que un "te llamo" o "hablamos" es un "chao", más de alguna vez me quedé esperando una llamada telefónica, pensando que eso me querían decir, cuando en realidad era decir chao. Me carga esa situación...

Por qué no se valora el tiempo de las personas? todos llegan tarde a reuniones sociales o de trabajo, y es normal, y todos se programan para funcionar con 15 o 30 minutos de diferencia. Y si eso es así con lo laboral y amigos, que decir de l@s amigovi@s o no-novi@s. En ese sentido la valorización cuesta aún más.

Y que deberíamos esperar, es normal, por qué no se es claro, directo y franco y se dice lo que se desea o no del otro. Esto me hace recordar que, como las cosas no se valoran o no se es capaz de decir las cosas por su nombre, por cobardía o doble estándar, que estoy pololeando, si desde hace varios años, una polola que tuve, cuya relación no iba a buen puerto derivo en que nos dejamos de ver, de llamar y ya... por lo tanto, llevo como 13 años pololeando con Marcia, jajaja que raro esto.

En definitiva, me gustaría que se valorara a quien tenemos al lado, me gustaría darle el justo valor a quienes me rodean y con quienes me relaciones y que por lo mismo, que valoraran las relaciones humanas que manejamos.

Pido demasiado, lo sé, pero en pedir no hay engaño, o si?

Validación

Llegó el momento... como dicen en la TV. Como parte de los procesos internos, de crecimiento y reafirmación de nuestro lugar en el mundo tomé la decisión... en realidad la había tomado hace meses, pero por circunstancias de la vida y otras veces porque me inventé las excusas, no lo hacía.

El caso es que reuní a mis padres y les conté lo que me pasaba y quien era en realidad en todos los aspectos de la vida. Así fue como le conté lo que sentía, mis sueños y esperanzas, los deseos que vivir la vida desde la parada que creo es la más honesta.

Conversé de mis conflictos, del trabajo voluntario que hago, de los derechos que tenemos todos de vivir plenamente y sin que nos apunten con el dedo, y menos a sentir culpa.

Ahora sé que la aceptación y valoración vienen con el tiempo, pero tengo fe que así será, me quieren y eso no se borra.

A la deriva

El Capitán no sabía dónde llegar, era el polo, todo era blanco, todo era frío, todo era invierno y su brújula no era útil. Qué hacer? la tripulación presionaba, esperaba respuestas, esperaba legar a puerto, debían entregar la mercacía que proveería a su comunidad por mucho tiempo más, debían responder.

Pero nada, ruta que tomaban les mostraba el mismo panorama, bloques de hielo tan blancos que llegaban a ser azules de lo potente. Por otra parte, con quien más compartía el Capitán era su fiel loro, que ya estaba mutando, era una mezcla kafkiana de grillo/loro, nada grato a ratos y que sumaba más resión al viaje.

Así las cosas y con sólo invierno, sólo frío, sólo blanco al rededor el Capitan decidió virar 30° a babor y dejar que el barco siguiera según la corriente, con la secreta esperanza de que apareciera la ruta, y así poder llegar a puerto. Pero lo que la tripulación no sabía era que lo que secretamente esperaba el Capitán era que esa sirena que lo movió ser Capitán apareciera nuevamente y le hablara del mundo submarino, de los colores y de la felicidad.

El Grito

Hoy fue un día raro, he tenido ganas de gritar. Es que no tengo mucha tolerancia cuando las cosas no salen como espero, sobre todo si me preocupo que así sea, si tengo puesta mis ganas y esperanzas en que ciertas cosas pasen.

Hoy se me cayó todo, desde el pago de una factura que no ocurrió y debía haber ocurrido la semana pasada, no me reservaron el estacionamiento prometido, partió tarde una reunión, lo que me retrasó el resto de las actividades que debía desarrollardurante el día y que tuve que cancelar, en parte.

Más encima ciertos planes personales que tenia y que venía confirmado desde hace un par de semanas, se cae... que más puedo hacer, la verdad es que gritar y mandar a la mierda al mundo. Pero la culoa no es del mundo, así que mejor vivir el momento, tomar las riendas y superar el, o más bien LOS momentos.

Opción de futuro

Cómo iba a saber aquel pequeño gato que el tacho con agua, algo de leche y esos trapos viejos y que olían a humedad era todo lo que obtendría? Él no sabía que estaba en ese lugar para cazar a todos aquellos ratones que habitaban entre los fardos de heno.

Pero esa era su realidad, sin más había sido sacado del lugar que ocupaba junto a sus hermanos para ser trasladado a otro y sin mayores motivos. Y ahora, que debía esperar? Cuánto podría ambicionar ahora?

Ahora debe reconocer que eso es el futuro y la felicidad, que a eso es a lo que puede postular, por lo tanto, puede mejorar las condiciones, pero sólo dentro de sus capacidades, capacidades gatunas y limitadas que para estas circunstancias deberían de evolucionar y permitir cambiar lo que tenía.

Pero mientras trabajaba en hacer acogedor su nuevo hogar, descubrió un brillo en la esquina, algo que le llamó la atención. A medida que se acercaba el brillo crecía, y así creció hasta trasformarse en la fisura que comunicaba el galpón con el exterior.

Miró hacia fuera, era hermoso, pero atemorizante, el sol brillaba, al menos por ese momento, no lo había visto antes, será que llegó de noche y ya llevaba horas en el lugar? Cómo saber cuánto llevaba ahí?

Pensó en salir y cambiar su fortuna, tenía la posibilidad, estaba frente a la posibilidad de cambiar, cambiar el hogar formado, no muy grato como el anterior, pero propio; por algo a lo que debía apostar. Difícil decisión.

Pseudocomentarista, misógino y machista

Aunque no se crea, los líderes de opinión de éste país, también son alcanzados cuando su actuar o su discurso va contra el pensamiento de grupos organizados de distinto tipo.

Por lo mismo, cualquiera sea la causa que te agrupe, a la que sumes, si te sientes pasado a llevar, manifiéstate, tienes tu libertad, tienes tu derecho a libre pataleo.

Así lo comprobí Fernando Villegas... para muestra un botón...

http://www.youtube.com/watch?v=crYAz0FZn08

Amor de Tarde

Hace unos días estuve súper enfermo, pero como el deber manda, salí a hacer el programade radio que tengo con mis amigos, como un sábado más... pusimos un tema interpretado por de Celeste Carballo y Sandra Mihanovich, que se llama Te Amo, aunque muchos le dicen "somos mucho más que dos", al aire hice el comentario que la letra de esa canción es un poema del uruguayo Mario Benedetti.

Asociado a la alusión de poemas, hace un tiempo conocí a alguien que lee poesía a cierto grupo de novelistas gringos... el caso es que por esos azares de la vida llegó a mis manos el siguiente poema de Benedetti y que refleja una sensación de hace unos días...

Amor de Tarde

Es una lástima que no estés conmigo

cuando miro el reloj y son las 4

y acabo la planilla

y pienso 10 minutos,

y estiro las piernas,

como todas las tardes,

y hago así con los hombros

para aflojar la espalda

y me doblo los dedos

y les saco mentiras.

Es una lástima que no estés conmigo

cuando miro el reloj y son las 5

y soy una manija

que calcula interéses,

o dos manos

que saltan sobre 40 teclas

o un oído

que escucha como ladra el teléfono,

o un tipo que hace números

y les saca verdades.

Es una lástima que no estés conmigo
cuando miro el reloj y son las 6

podrías acercarte de sorpresa

y decirme "qué tal?"

y quedaríamos

yo, con la mancha roja de tus labios

tú, con el tizne azul de mi carbónico

Quién no ha tenido un amor de tarde?... tan efímero como éste...

Fantasía o Realidad

¿Cómo saber si estamos soñando o viviendo la realidad? Podríamos estar en la matriz con Neo y no darnos cuenta… podríamos estar pasándonos autogoles todo el rato y no darnos cuenta.

A veces creamos nuestros propios sueños, nuestras propias fantasías para escaparnos de la realidad que no nos resulta grata, más bien nos resulta dolorosa o angustiante. Esa es una opción de vida y válida para el que quiera, además no podemos negar que en el ambiente en que nos desenvolvemos es bastante común, el crear fantasías en torno a donde vivimos, los apellidos, las amistades, etc.

Cuesta bastante ser honesto, y serlo con uno mismo es también complicado. En ese sentido yo peco de fantasioso y rollero, de pasarme películas sólo, si las cosas no suceden como se supone debían ocurrir, me pongo en las peores situaciones, lo paso mal y luego me doy cuenta de que era demasiado.

Conversaba con un amigo por éste tema y me decía que se encuentra en un proceso de salir de sus fantasías y tratando de volver al mundo real, y está descubriendo que las cosas no son tan color de rosa con su pareja y algunos amigos. Pero que, según sus palabras, esta “separando la paja del grano”. Pelao bien por ti… fuerza ante todo y no retrocedas.

Por mi parte no me queda más que bajar mis películas en technicolor y asumir las cosas como son, por felices o dolorosas que sean. Bajarle a las revoluciones de mi cabecita y vivir la realidad, como es…

El dibujo es el regalo y aporte de un artista emergente de nuestro medio